La explosión del Internet a finales de la década de los 90 trajo consigo una serie de ventajas, simplificaciones y bondades para la vida del ser humano moderno, el cual empezó a evolucionar al ritmo de esta tecnología punta.
A la par del nacimiento de esta extraordinaria plataforma mundial también aparecieron una serie de problemas informáticos que dejaron una estela de pérdidas económicas y millones de ordenadores dañados.
El virus Melissa
Uno de los casos más emblemáticos es el del “virus Melissa”, el cual hizo su primer asalto el 26 de marzo de 1999, y que pasó desapercibido en miles de correos electrónicos por su nombre de mujer e innovadora estrategia.
¿Pero por qué “Melissa” causó tanto daño? Especialistas en informática aseguran que su diseño, basado en las más sofisticadas técnicas de ingeniería social de entonces, hicieron que este mensaje “maligno” calara dentro de tantas personas.
El email, que empezaba diciendo algo así como “Aquí tienes lo que me pediste, no se lo muestres a nadie”, tenía unos archivos de Microsoft Word adjuntos, y logró ser tan desastroso que se estima que los daños que causaron ascendieron a los 80 millones de dólares solo en Estados Unidos.
De hecho, los entonces magnates de Internet y la informática como Microsoft e Intel decidieron bloquear sus accesos al mundo digital para que este malware no siguiera penetrando dentro de sus sistemas.
El origen de los virus informáticos
Desde que Internet es Internet han existido toda clase de virus informáticos. Sin embargo, “Melissa” destaca por ser el primero en donde utilizaba el servicio de email con datos adjuntos com0 plataforma de propagación.
Lo más peligroso de este archivo es que tenía la capacidad de robar toda la lista de tus contactos y ser enviado a cinco de ellos en diferentes lotes, lo cual hizo que la infección se expandiera sin control hasta cierto punto.
Por supuesto, en una época en la que no era frecuente que existieran sistemas de copias de seguridad ante estos ataques cibernéticos, millones de personas cayeron en la trampa del creador de este sistema malicioso.
El hombre, quien fue identificado en su momento como David L. Smith, pronto admitió su responsabilidad en el caso, y aseguró que nunca se imaginó que el virus se convirtiera en un gran caos electrónico.
Smith, nativo de Nueva Jersey, fue condenado a pasar 10 años en una cárcel federal, pero al cabo de 20 meses salió libre por su buen comportamiento y por pagar una multa que ascendió a los 5 mil dólares.
Pero…¿Quién es Melissa?
Tras el caos que se formó en Internet, “Melissa” generó muchísimos titulares de prensa y alertó a los grandes de la informática, por lo que era hora de idear herramientas que los protegieran a ellos y sus clientes de estos ataques.
“Melissa” quien ahora es recordada como uno de los ataques en Internet más emblemáticos de la historia contemporánea, era una simple joven bailarina exótica de Florida que se había convertido en el amor y obsesión de David L Smith durante años.
Smith se puso posteriormente a disposición del FBI para dar con la identidad de un hombre holandés que creó un virus similarmente letal que bautizó en “honor” a la tenista rusa Anna Kournikova.
Dato curioso: Antes de “Melissa”, David L. Smith creó 11 versiones similares del malware pero menos letales con el mismo nombre pero con códigos cifrados.